Soy murciano de nacimiento, de padre andaluz y madre murciana. Empecé a sentir el morbo de las letras con catorce años, por esa época ya golpeaba la guitarra, así que con muy mala ortografía comencé a escribir poemas, frases y palabras que iba aprendiendo de los mayores maestros que he tenido y que residían en los libros.
Cuando escuché mi primera canción de rap supe que la letra tenía una mayor importancia. Era esa manera ácida, directa como un golpe, la que me convenció. Así que empecé hacer rap y poco a poco fui introduciendo la guitarra hasta fusionar varios estilos con la dureza del hip-hop.
Formé con Nene Mc un grupo con el cual tocamos en salas de Murcia y grabamos dos maquetas, la última Exilio.
Ahora con el último proyecto en solitario, Cabaret's blues doy el matiz que quiero dar a las canciones, la importancia de escribir a pie de la calle, a los perdedores, a los que trabajan, a los soñadores que nunca pierden la esperanza.
En directo voy con mi guitarra, haciendo camino sobre el verbo y las miradas, sobre la realidad y las metáforas, la poesía y las notas.